Ley de Startups: Impulso al Ecosistema Emprendedor en España
En España, el pasado 28 de diciembre de 2022 entró en vigor la Ley 28/2022, también conocida como Ley de Startups, que busca fomentar el crecimiento y desarrollo del ecosistema de empresas emergentes. Esta ley tiene como objetivo establecer un marco jurídico que favorezca la creación y el crecimiento de empresas basadas en el conocimiento y la tecnología, adaptándose así a la economía actual, donde las empresas de base tecnológica están adquiriendo cada vez más relevancia.
I. Introducción a la nueva Ley de Startups
La Ley de Startups, formalmente conocida como Ley 28/2022, tiene como propósito principal facilitar el crecimiento y la relocalización de empresas emergentes en España. Para ello, establece condiciones que favorecen su capacidad de internacionalización, atrayendo talento y capital internacional al ecosistema español de empresas emergentes. Además, busca estimular tanto la inversión pública como la privada en este tipo de empresas, promoviendo la interrelación entre empresas, agentes financiadores y territorios.
La ley también tiene como objetivo impulsar el acercamiento entre la formación profesional, la universidad y las empresas emergentes, fomentando la transferencia de conocimientos desde la Universidad y los organismos públicos de investigación al mundo empresarial. Asimismo, busca eliminar las brechas de género existentes en el ecosistema español de empresas emergentes y apoyar el desarrollo de polos de atracción de empresas e inversores.
II. Qué es una «startup»
Dentro de este ecosistema emprendedor, una startup se define como una empresa de reciente creación que se enfoca en la investigación y el desarrollo tecnológico para encontrar soluciones innovadoras a problemas existentes. A diferencia de otras empresas de nueva creación que buscan aplicar ideas y tecnologías ya desarrolladas para obtener beneficios económicos, las startups se caracterizan por su potencial de crecimiento y su enfoque en la innovación.
Según lo establecido en el artículo 3 de la Ley de Startups, una empresa emergente, a efectos de esta ley, es aquella persona jurídica que cumple con las siguientes condiciones:
a) Ser de nueva creación o tener menos de cinco años desde su inscripción en el Registro Mercantil, o hasta siete años en el caso de empresas de sectores estratégicos o con tecnología propia desarrollada íntegramente en España.
b) No haber surgido de una operación de fusión, escisión o transformación de empresas que no tengan consideración de empresas emergentes.
c) No haber distribuido dividendos o retornos, ni cotizar en un mercado regulado.
d) Tener su sede social, domicilio social o establecimiento permanente en España.
e) Tener al menos el 60% de su plantilla con contrato laboral en España.
f) Desarrollar un proyecto de emprendimiento innovador con un modelo de negocio escalable.
g) No haber distribuido dividendos o retornos, ni cotizar en un mercado regulado.
h) Tener su sede social, domicilio social o establecimiento permanente en España.
i) Tener al menos el 60% de su plantilla con contrato laboral en España.
j) Desarrollar un proyecto de emprendimiento innovador con un modelo de negocio escalable.
Es importante destacar que la evaluación de la innovación y viabilidad del modelo de negocio de una startup será realizada por ENISA (Empresa Nacional de Innovación, S.M.E., S.A.), quien será la encargada de emitir un informe de viabilidad que certifique su condición de empresa emergente.
III. Beneficios y medidas de apoyo para las startups
La Ley de Startups establece una serie de beneficios y medidas de apoyo que buscan fomentar el desarrollo y crecimiento de las empresas emergentes en España. Algunas de estas medidas son:
- Visado para emprendedores: Se crea un visado especial para emprendedores extranjeros que deseen establecerse en España para desarrollar un proyecto empresarial de base tecnológica. Este visado facilita la entrada y residencia en el país durante un periodo de tiempo determinado, permitiendo así atraer talento internacional.
- Incentivos fiscales: Se establecen incentivos fiscales para los inversores en startups, como la reducción en el impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) y el impuesto sobre el patrimonio. Esto busca fomentar la inversión privada en estas empresas y atraer capital nacional e internacional.
- Agilización de trámites administrativos: Se implementan medidas para simplificar y agilizar los trámites administrativos necesarios para la creación y desarrollo de startups, reduciendo la burocracia y facilitando su puesta en marcha.
- Apoyo a la financiación: Se promueve el acceso a la financiación tanto pública como privada a través de instrumentos financieros como préstamos participativos, garantías y líneas de financiación específicas para startups. Además, se fomenta la colaboración entre startups y entidades financieras.
- Impulso a la transferencia tecnológica: Se busca fortalecer la colaboración entre la universidad, los centros de investigación y las startups, fomentando la transferencia de conocimientos y tecnología desde el ámbito académico al empresarial.
- Apoyo a la internacionalización: Se promueve la internacionalización de las startups españolas a través de la participación en programas de aceleración, misiones comerciales, ferias internacionales y otros eventos que faciliten la conexión con inversores y mercados extranjeros.
- Estímulo a la participación femenina: Se establecen medidas para fomentar la participación de las mujeres en el ecosistema emprendedor, promoviendo la igualdad de oportunidades y la eliminación de barreras de género.
Estas medidas buscan crear un entorno favorable para el desarrollo de startups en España, impulsando la innovación, la creación de empleo y el crecimiento económico.
IV. Conclusiones
La Ley de Startups en España marca un hito importante en el impulso al ecosistema emprendedor. Esta ley proporciona un marco jurídico favorable para el desarrollo de empresas emergentes, fomentando la innovación, la inversión y la creación de empleo.
Con la implementación de la Ley de Startups, España busca posicionarse como un referente internacional en el ámbito de la innovación y emprendimiento. La ley ofrece una serie de beneficios y medidas de apoyo que buscan atraer talento, facilitar la financiación, simplificar trámites y promover la colaboración entre diferentes actores del ecosistema emprendedor.
Se espera que esta legislación contribuya al crecimiento del número de startups en España y al impulso de proyectos disruptivos con potencial de escala global. Además, la ley tiene como objetivo principal la generación de empleo de calidad y el fomento de la competitividad del país en sectores estratégicos.
En resumen, la Ley de Startups en España representa un paso importante en el apoyo y fortalecimiento del ecosistema emprendedor, creando un entorno favorable para el desarrollo de empresas innovadoras y sostenibles.