Resumen
Una reciente sentencia judicial ha condenado a un restaurante por un despido con tintes racistas, lo que ha generado interrogantes sobre cómo se puede demostrar la discriminación racial en el ámbito laboral una vez que el empleado ha sido despedido. En este artículo, analizaremos las claves para probar el racismo en una empresa y los pasos que un trabajador puede seguir en caso de ser víctima de discriminación racial. Además, examinaremos las consecuencias económicas para las empresas que incurren en conductas racistas y las multas y sanciones contempladas por la Ley Zerolo, una normativa integral para la igualdad de trato y la no discriminación.
1. Introducción
- La sentencia de un juez de León que declara nulo un despido por motivos racistas.
- El debate sobre el racismo en España y el caso ‘Vinícius’.
- En su sentencia, el juzgado declara nulo el cese por discriminatorio y condena a la dueña del local a pagar al empleado una indemnización de 7.501 euros, además de tener que readmitirlo en las mismas condiciones.
2. Cómo probar la discriminación racial en el trabajo
2.1 Indicios de discriminación
- La importancia de aportar «indicios fundados de discriminación».
- Testimonios, documentos y pruebas audiovisuales como evidencia.
- Caso de una empleada víctima de acoso racista y la importancia de las pruebas.
2.2 Protocolo de denuncia
- El papel de los canales de denuncia en la empresa.
- Caso de una operaria despedida por acoso racista y la falta de denuncia formal.
- Resistencia de los jueces a aceptar la discriminación sin una denuncia formal.
2.3 Carga de la prueba
- La empresa debe desmontar la acusación de racismo y acreditar los hechos que motivaron el despido.
- Situación contradictoria: justificación insuficiente para el despido, pero no suficiente para declarar nulidad.
3. Multas y sanciones para empresas racistas
3.1 Indemnización
- Consecuencias económicas para las empresas por conductas racistas.
- Indemnización por daños morales sufridos por el trabajador.
- Referencia a la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social.
3.2 Multas
- La Ley Zerolo y el marco sancionador para empresas racistas.
- Sanciones económicas según la gravedad del acto, facturación y trabajadores afectados.
- Pérdida de ayudas o subvenciones y posible veto de acceso a financiación pública.
Conclusión
En casos de discriminación racial en el ámbito laboral, es fundamental contar con indicios sólidos que respalden la acusación y seguir el protocolo de denuncia establecido por la empresa. Los trabajadores deben aportar pruebas documentales, testimonios o grabaciones que evidencien el comportamiento racista. Además, las empresas deben justificar de manera objetiva cualquier acción perjudicial contra el empleado. Aquellas empresas que incurran en conductas racistas pueden enfrentar importantes consecuencias económicas, como indemnizaciones y multas significativas, de acuerdo con la Ley Zerolo. Es fundamental fomentar un entorno laboral inclusivo y libre de discriminación racial.
Protocolo
Los protocolos que las empresas están obligadas a habilitar para informar de posibles casos de discriminación.
Suponen una valiosa prueba para demostrar que hay un trato desigual según la etnia, los jueces pueden resistirse a aceptar que hay trato discriminatorio. Así quedó patente, por ejemplo, en un asunto resuelto por el TSJ de Valencia en 2021. La Sala desestimó el recurso de la trabajadora porque no utilizó los canales para dar aviso sobre el acoso racista, ni tampoco dio aviso a recursos humanos ni al comité de empresa.
“debe desmontar la acusación de racismo y acreditar qué hechos concretos motivaron la sanción contra el empleado»
Las empresas que incurran en conductas racistas pueden afrontar relevantes consecuencias económicas. La Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social,
“las indemnizaciones pueden alcanzar la cuantía de los 225.000 euros en los casos de máxima gravedad”,
En caso de despido, además, el empleado tendrá que ser readmitido y cobrar los salarios de trámite (esto es, aquellos que dejó de percibir hasta la resolución del pleito, más los intereses).
Ley Zerolo, la norma integral para la igualdad de trato y la no discriminación, refuerza el marco sancionador para las empresas que incurran en discriminación racial.
Según la gravedad del acto, el nivel de facturación de la empresa o el número de trabajadores afectados, la sanción para el empresario puede alcanzar la cifra de medio millón de euros en casos extremos. Además, si la infracción es calificada como grave o muy grave, la Ley Zerolo prevé que la sociedad pierda cualquier ayuda o subvención para la promoción de empleo que haya recibido.